Si pensamos en el futuro del planeta, no podemos descartar las armas nucleares ni mucho más que vendrá en éste ámbito. El pensamiento queda corto en cuánto a lo que los países podrían desarrollar con respecto a las armas nucleares. En realidad no es éste el punto más importante, sino, en manos de quién están estas armas, ya que basta con apretar un botón y estalla una nueva guerra. El poder de destrucción lo tiene el hombre y él tiene el deber de proteger al planeta.
¿ES POSIBLE UN MUNDO SIN ARMAS NUCLEARES?
Empezamos el año con uno de los personajes mas conocidos y a la vez enigmáticos del panorama internacional, el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un.
El Sr Jong-un en su discurso de año nuevo dirigido a sus más de veinticinco millones de ciudadanos dejó claro que “Todo Estados Unidos está al alcance de nuestras armas nucleares” y hay un botón nuclear siempre en mi escritorio. Esta es la realidad, no una amenaza”.
El país asiático realizó su sexta y más potente prueba nuclear este año pasado 2017, con un lanzamiento de veinte misiles, algunos de ellos de alcance intercontinental. No es secreto que los coreanos tienen armamento para atacar todo Estados Unidos.
La mayoría de los analistas en Seguridad Internacional coinciden en asegurar que el mundo no ha estado tan cerca de una guerra nuclear como en la actualidad. A pesar de las advertencias de muchos países, organismos internacionales y de la propia historia, las armas nucleares parecen destinadas a no desparecer nunca, ¿la raza humana puede permitirse tener tal poder de destrucción?
En el siglo XX hubo intentos para frenar la proliferación de este tipo de armamento, con la firma el año 1968 del Tratado de No Proliferación de Armamento Nuclear (NPT, por sus siglas en inglés). Este tratado pretendía restringir y reducir la posesión de armas nucleares, pero a mi modo de ver, a sido un fracaso.
Si bien es cierto que los norteamericanos y los rusos han accedido a reducir su armamento, hoy en día, existen más potencias nucleares y posiblemente el dato más negativo, sus gobernantes no parecen ser muy estables.
Estas potencias defienden que el armamento atómico es solo disuasorio, pero nadie garantiza que no se utilicen, ¿O acaso los americanos hicieron una demostración de su famosa bomba Little Boy antes de lanzarla sobre Hiroshima? Recordemos que el objetivo del ataque era conseguir la rendición de Japón y dar por finalizada la segunda guerra mundial.
Tratado de la ONU
A nivel mundial la Organización de las Naciones Unidas aprobó un tratado el pasado verano, el tratado para la prohibición de las armas nucleares, sin embargo y como era de esperar solo cincuenta países lo han firmado, siendo destacable la ausencia en la votación de todos los miembros de la OTAN a excepción de Holanda (que votó en contra del mismo) y de Japón, único país bombardeado con esta tecnología bélica. Veremos qué depara el futuro sobre esta materia, por el momento los impulsores de este tratado lo consideran un primer paso para, de manera indirecta, construir una cultura antinuclear.
Proyecto ITER
Para finalizar esta entrada del blog me ha venido a la mente el quinto proyecto más caro de la historia de la humanidad, el ITER (Reactor Termonuclear Experimental Internacional), proyecto que persigue demostrar que la fusión nuclear puede producirse con fines comerciales y científicos. Si el ITER en las próximas décadas muestra al mundo que la fusión puede utilizarse a gran escala, ¿podríamos estar ante el final de la energía nuclear convencional? ¿Y de las armas nucleares? O contrariamente, ¿Desarrollaríamos armamento a partir de la fusión nuclear?
Dejando estas preguntas en el aire, un dato: en la actualidad los únicos países con capacidad militar de ámbito nuclear son los Estados Unidos, Rusia, Israel, Pakistán, India, Francia, Reino Unido, China y Corea del Norte,
¿Creen ustedes que la lista de países con capacidad militar nuclear aumentará?
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